El silencio del Mediterráneo acaricia las playas
Azul el cielo, azul el agua
Azul las puertas y ventanas de las casas bajas
Un solo caminante se adueña de los barcos
Y de los sueños ajenos que son más que propios
Un mundo callado rodea los mástiles de las velas blancas
No hay comentarios:
Publicar un comentario