martes, 10 de septiembre de 2013

Las chicas somos incomprensibles

Si hay algo que tenemos en común todas las mujeres es que no nos entendemos ni nosotras. Sin embargo, es más fácil explicar nuestros sentimientos a otras chicas porque es difícil que los hombres comprendan la magnitud de nuestro sentir. Y aún contando con el asentimiento de una amiga, muchas veces ni sabemos por qué nos sentimos como nos sentimos.

¿Por qué la desazón, la angustia, la molestia generalizada? ¿Por qué la ansiedad, el temor? La respuesta es que no hay respuesta. El porqué es algo que nunca comprenderemos ni antes, ni durante, ni después de la crisis o situación que sea. Lo que sea que nos suceda no tiene, por sí mismo, una causa lógica; más bien tendrá, eventualmente, una moraleja o una enseñanza.

Y aún sabiendo todo esto, nosotras las mujeres seguimos intentando explicar lo que nos pasa como para tenerlo controlado, como para tener la falsa ilusión de que todo lo que ocurre tiene una justificación. Por eso creo que no podemos explicar bien esto a los hombres: ellos, muchas veces, ni se preguntan por qué pasa lo que pasa, sólo ven si pueden hacer algo y listo. Y si nada pueden hacer no hay por qué preocuparse.

Me gustaría que no me importe. Me gustaría que las mujeres abandonemos nuestro afán de control. Me gustaría no intentar explicar cómo me siento si no aceptarlo y dejarlo pasar así no jode más. Trataré de poner en práctica esto. Ya les contaré cómo me va.